La búsqueda de la alférez Ashley Vargas, piloto de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), continúa tras siete días de su desaparición durante un accidente aéreo. Según informes, la aeronave sufrió un aterrizaje forzoso quedando invertida, y aunque los otros ocupantes solo sufrieron lesiones leves, Vargas sigue sin ser encontrada.
Los familiares de la piloto han emitido un comunicado criticando a la FAP, alegando que la institución prioriza la recuperación de la aeronave sobre la búsqueda de la joven. «La Fuerza Aérea se preocupa más por el avión que por encontrar a Ashley», expresaron.
El piloto rescatado, quien sufrió heridas leves, mencionó que el accidente se debió a una falta de combustible. Sin embargo, la FAP asegura que la aeronave cumplía con todos los estándares técnicos necesarios.
Este incidente revive el caso de Vargas, quien envió un video a su familia un día antes del accidente. Además, pone en evidencia el incremento de accidentes aéreos en Perú, especialmente aquellos que involucran avionetas.
En otro incidente reciente, una avioneta realizó un aterrizaje de emergencia cerca de una planta de Pluspetrol debido a una falla en el motor. Afortunadamente, no hubo víctimas mortales, pero el accidente ocurrió a solo 200 metros de un asentamiento humano, lo que pudo haber terminado en tragedia.
En San Bartolo, otra avioneta cayó al mar, mientras que en un incidente separado, una aeronave chocó contra una casa deshabitada. Los vecinos ayudaron a apagar el incendio resultante, y el piloto fue trasladado a un centro médico local.
Estos eventos resaltan la creciente preocupación por la seguridad aérea en el país, especialmente en lo que respecta a avionetas, las cuales han estado involucradas en la mayoría de estos accidentes.










