La DIRINCRI logró la captura de un peligroso clan familiar conocido como «Los Detonadores de Puente», dedicado a la extorsión de negocios en Puente Piedra mediante el uso de artefactos explosivos. Entre los detenidos se encuentra un menor de 16 años, adiestrado por sus padres en estas actividades delictivas.
Según informes policiales, los sujetos, identificados como Cristhian Palomino Valladares (alias «Barakus») y Sully Galarza Rengifo (alias «La Tía»), eran expertos en el manejo de explosivos y amenazaban a comerciantes de la zona. Las cámaras de seguridad fueron clave para su identificación y posterior captura.
Esta detención se produce en un contexto relevante: recientemente se promulgó una ley que permite procesar como adultos a adolescentes de 17 y 18 años que cometan delitos graves. Aunque el menor capturado tiene 16 años, el caso reaviva el debate sobre la responsabilidad penal juvenil.
Las autoridades destacan que este clan operaba con alto nivel de organización, utilizando tácticas intimidatorias con explosivos para extorsionar a negocios locales. La investigación continúa para determinar si están vinculados a otros delitos en la zona.










