Un incendio de gran magnitud redujo a cenizas un almacén de fertilizantes y productos químicos en el distrito de San Luis, generando alarma entre los vecinos y comerciantes de la zona. El siniestro, ocurrido el último viernes por la tarde, ha dejado secuelas ambientales y económicas, mientras los afectados exigen respuestas de las autoridades.
El fuego se inició alrededor de las 3:30 p.m. en el jirón Enrique Nerini, a pocas cuadras de la avenida Arriola. La emergencia requirió la intervención de más de 15 unidades del Cuerpo General de Bomberos, quienes lograron controlar las llamas y evitar que se propagaran a zonas aledañas.
Al día siguiente, los daños eran evidentes: estructuras calcinadas y un intenso olor a químicos que afectó a comerciantes y trabajadores de negocios cercanos. Ante la presencia de humo y sustancias tóxicas en el aire, muchos vecinos optaron por usar mascarillas como medida de protección.
La zona permaneció bajo resguardo policial mientras se esperaba la llegada de peritos para determinar el origen del incendio. Los afectados reclaman mayor atención de las autoridades locales para prevenir futuros incidentes y mitigar los impactos en la salud y el comercio.
Este caso ha reavivado el debate sobre la seguridad en el almacenamiento de productos químicos en zonas urbanas, así como la necesidad de protocolos más efectivos para responder a emergencias de este tipo.
